VÍCTIMAS  DE  TERRORISMO  Y  ENGAÑOS  PSICÓLOGICOS.

Me desconcierta el que hoy, 11 de marzo de 2014, prácticamente todos los infomedios, como puestos de acuerdo, o mandados por alguna desconocida entidad superior, nos fuercen a revivir  el sangriento día del atentado de los trenes de Madrid que causaron 191 asesinatos y 1.858 heridos.

   Hasta hace poco tiempo, los psicólogos y expertos en estos terribles sucesos aconsejaban enfáticamente que se debía ayudar a los afectados y a los supervivientes a mirar hacia adelante; a tratar de olvidar la repentina y brutal desgracia que unos asesinos infligieron a sus vidas. 

Se aseguraba que era bueno para la salud mental  y física de los afectados el dejar atrás  la muerte y el abrazarse a la vida.

   Sin embargo, desde hace un tiempo, y  coincidiendo con la sacralización de las asociaciones de víctimas de la ETA, parece que lo recomendable es precisamente lo contrario; las víctimas sobrevivientes y su familiares aparecen una y otra vez en la TV, en ciertos periódicos y algunas emisoras de radio recordando minuciosamente las circunstancias que padecieron ellos directamente o las personas amadas.

   Personalmente, esa actitud de vivir constantemente dedicados a revivir momentos de intenso dolor me parece  una acción desaconsejable para  la buena salud de las personas. He vivido la muerte de  seres muy queridos y, naturalmente que los recuerdo; y en ocasiones, me reconforta el hacerlo. 

Pero, otra cosa muy distinta es el dedicarse a vivir esencialmente para los muertos y buscar el recuerdo de las circunstancias de su muerte. ¿Es lo que recomiendan los expertos?.

   Repito que me extraña el hecho de que ningún infomedio convoque a uno de los psicólogos que frecuentan los medios para que nos ofrezca su juicio sobre esta situación.

   Yo, por el momento, me siento desconcertado y algo engañado, pues, si hasta hace poco tiempo se nos afirmaba una cosa, y ahora se hace la contraria, o los psicólogos declaran los que esperan que esté de moda, o no tienen mucha idea de lo que dicen, o no aciertan con sus tratamientos o no poseen suficiente convicción en su argumentos para  defenderlos cuando son cuestionados o puestos en evidencia...¿según por quienes sea?