SOMOS  HUMAZOMBIES?...

Cada vez con más frecuencia me asalta la pre-idea de que, en realidad, no somos del todo humanos; somos seres con los genes programados para actuar ante ciertos estímulos;

 por ejemplo: apenas hace un poco de sol, debemos de salir a pasear. Y, ante la presencia de una terracita, con sus mesitas y sillas alrededor, ¡Zas!,  dentro de nuestro presunto cerebro se dispara la programación 

automática que nos han colocado, y un impulso irresistible nos empuja forzadamente a sentarnos y pedir algo que consumir.

  Poco importa que apenas tengamos ingresos para gastar en bebidas o, más grave, bebidas acompañadas de artículos comestibles;

 No podemos resistirnos; no es voluntad nuestra; son los implantes que nos convierten en Humazombies, la nueva etnia del  Futuro Inmediato, 

diseñados para realizar determinadas acciones reflejas  ante  ciertos estímulos previamente programados en alguno de  los muuchos espacios vacíos que alberga nuestro presunto cerebro.

   Esta pre- idea puede que sirva para explicarme el, para mí, desconcertante hecho de que, pese a la terrible crisis que nos aplasta, parezca haber tanta gente dispuesta a ocupar las sillitas de las terracitas que ocupan las callecitas de los pueblecitos  y  de  las ciudaditas.

   También puede que nos afecte el inconsciente pre- programado el fatigoso énfasis que ponen las cadenas de TV y de Radio insistiendo y insistiendo en que, lo que de verdad nos subyuga a todos los residentes de este tablao llamado España es la llegada del sol para cumplir el principal objetivo de nuestras vidas:

 buscar una terracita y unas sillitas para sentarnos y pedir y saborear unas cervecitas. ¿Crisis?, ¿Indignados? , ¿Qué es eso?. Probablemente, un invento de cuatro eternos radicales descontentos y cavernarios que viven en una burbuja mugrienta.

   Además, yo me angustio ante las incesantes repeticiones por parte de los locutores de radio y de TV de los índices de ocupación en la hostelería, tal parece que escucho dentro de mi cabezón  “La Cabalgata de las Valkirias” y siento incontrolables impulsos de cumplir con mi obligación

 de salir a las calles exigiendo mi terracita y mis sillitas para pedir unas cervecitas, contribuyendo así a la grandeza del tablao español y a los beneficios de unos cuantos españoles que sufrirán la crisis mucho menos que un servidor.

   Pero me consuelo intentando pre-pensar que, después de todo, yo no soy un ser humano, como me hacen creer,

 sino que soy tan solo un pobre Humazombie; una parte de humano y tres partes de zombie, esa es , más o menos ,  

 la fórmula que me parece probaron en un laboratorio de segunda para fabricarnos en serie hecha a intervalos.