miércoles, 4 de febrero de 2015








ESTADO  ISLÁMICO...








Una bandada de bestias ha acabado con la vida de un semejante quemándolo vivo.
  Recientemente, esta misma bandada  asesinó a otro semejante degollándole ante las cámaras.
   La bandada de bestias ejecuta esas acciones  con frecuencia y ante las cámaras.



¿Cómo pueden  continuar  los infomedios  denominándoles “Estado Islámico”?.  Lo que están probando  que lo que  pueden ser es  un Estado de Bestialidad.
   Cuando tengo noticia de esa manera de acabar con la vida de un semejante, yo, que soy un humilde infiel en la Fe del Islam, pienso que esa bandada de bestias ensombrecen la palabra y el concepto del Islam.
La verdadera Guerra debe ser  contra la miseria



  Al actuar de esa manera inhumana, esa organización bestial pierde los posibles  argumentos de  que pudieran  disponer para tratar de justificar su recurso a la lucha violenta, a la toma de las armas para  luchar contra sus enemigos, contra  aquellos que les oprimen.
  Escucho a algunos decir que, matando de esa manera propia de bestias, pueden disfrutar de aureola de bestias duras, implacables con quienes les atacan. Pero eso es propio de un estadio mental orillante de la animalidad; se podría inferir que los perpetradores de esos actos bestiales y quienes puedan sentir respeto por ellos y decidir seguirles no son dignos de llamarse Personas. Ni mucho menos adjudicarse el nombre de Estado Islámico. A lo que se hacen acreedores es a ser un Estado de Bestialidad y merecedores al desprecio de los creyentes en el Islam y de todos los humanos.
Combatir la explotación y acabar con ella en todo el mundo.



   En cuanto a las maneras de  combatir contra esas acciones bestiales, pues se puede atacar  a  los bestias mediante bombardeos, luchas armadas...
   Esta opción puede matar a un número  incierto de combatientes y destruir alguna cantidad de su logística y bienes o refugios, pero asimismo puede concederles, en sus ámbitos una aureola de mártires muertos luchando contra los infieles occidentales y sus  aliados  traidores al mundo islámico, ayudando, en cierta manera a  mantener las filas de sus combatientes de Primera Línea de muerte en un número aceptable para sus  jefes, que incluso pueden presumir de que luchan contra los enemigos del Islam, según sus procesos mentales.
  Eso dejando a un lado, por el momento, el probable número de bajas entre los combatientes, entre heridos y muertos y materiales y bienes destruidos y exiliados forzosos, que verán rotas sus  vidas y cargarán las arcas de las regiones en las que puedan asentarse, causando  graves disturbios económicos...y posiblemente sociales.
   Puede que exista otra opción de combatir al Estado Bestial.
  Y se trataría de construir en los países afectados por ese movimiento carreteras, hospitales, escuelas, industrias adaptadas al modo de vida de las regiones.
  Probablemente me equivoque, pero  pre pienso que si en  esos países, en esas regiones, las personas, pudiesen tener trabajo, medios de vivir con la mayor dignidad posible, en ese caso, quizá, llegaría el verdadero Islam a triunfar.