martes, 9 de septiembre de 2014




MR.  OBAMA, EL  PENSADOR  SIN   REMEDIO







Dicen los sesudos analistas de la política del actual presidente de los Estados Unidos de  Norteamérica que Mr. Obama es un presidente que sopesa muy bien las acciones a emprender en lo referente a política exterior de la Casa Blanca; puede pasarse meses discutiendo con sus asesores más cercanos los defectos y riesgos de las opciones a su alcance; dicen los sesudos analistas, que, por cierto, dan la acentuada impresión de ser bastante afines a Mr. Obama, que el presidente no desea cometer los mismos errores que llevaron al presidente Bush Hijo a emprender polémicas acciones respecto a campañas bélicas en Irak, las cuales dieron unos resultados costosos y sangrientos con beneficios poco aceptables por las opiniones públicas.
  Esos precedentes, uno de cuyos resultados indirectos, pero ciertos, es la aparición de grupos islamistas radicales como el conocido como Estado Islámico, que  parecen aprovecharse de la fragilidad de los seudo gobiernos creados parcialmente en base a determinados intereses occidentales y árabes que no parecen ser estrictamente políticos, sino de gran componente comercial, factor que no contribuye a sostener su credibilidad y prestigio ante sus conciudadanos y las intuiciones de la mayoría de  poblaciones del planeta.

Dejadme reflexionar un poco...Un mucho...


  Dicen algunos sesudos analistas que el presidente Mr. Obama está pensando profundamente las decisiones que debe de tomar en política exterior. Pero mientras, destacados miembros de su equipo  toman el papel de expeditivos ejecutantes realizando profusas declaraciones de acciones inminentes...
  Que son diluidas como terroncillos de azúcar, poco más tarde, por los Círculos Celestiales  más cercanos al presidente; las acciones anunciadas tendrán lugar “en el momento oportuno”...Que no llega.

Cuando tienes el mando tienes que decidir el rumbo...y afrontarlo


   Dicen que el presidente Obama está pensando profundamente en las consecuencias de cualquier posible acción.
   Y puede que lo que le suceda a Mr. Obama es que, después de pensar y hacer pensar a sus colaboradores, no se atreve a realizar ninguna acción; las teme a todas; está prisionero de las posibilidades de los posibles resultados y del deterioro que puedan ocasionar a su inmaculada imagen de presidente colegial.

El Poder está lleno de sombras...

   Lamentablemente, el presidente Obama recurre al uso de grandes gestos y apariciones en los medios, con ademanes y vocabulario solemnes disfrazando lo vacío de prácticas, para tratar de disimular su incapacidad para tomar una decisión, afrontar sus consecuencias y mostrar su capacidad –y la de su equipo--, para modificar aquellos aspectos más  negativos de las decisiones emprendidas; modificar lo que no funciona sobre la marcha es virtud inseparable de  un buen dirigente.
   Y reconocer lo que se ha hecho de manera desacertada, mostrando inmediatamente la rectificación del error y el buen resultado conseguido, es virtud de un buen estadista.

   Por esto, humildemente, creo que el presidente Obama no está pensando sobre las  decisiones a llevar a efecto; está  atrapado en sus temores e indecisiones, infinitamente mayores que sus capacidades de decisión; no parece pensar para alcanzar la claridad de objetivos a emprender, sino que piensa en aparentar que piensa, dejando transcurrir el tiempo a ver si  los hados de la suerte le favorecen; hace como que piensa porque no sabe qué pensar...y  Hacer